Josephine

Cuando Josephine Perkins despierta una mañana después de un sueño agitado, se encuentra en su cama con un desconocido.

Luis Salvago ha escrito una obra hermosa, sobria y brillante. Josephine es una historia que discurre en Tánger y en la mente de Abraham ¿o de Josephine? Con la prosa lírica y seductora que caracteriza al autor, se describen escenas que bien podrían acontecer en un cuadro de Edward Hopper, donde los personajes viven atrapados en sus propios pensamientos y emociones y su conexión con el mundo exterior es débil. Tristeza, nostalgia, dolor, soledad... habitan un paisaje desolado que transmite desamparo. Así como Hopper nos impacta visualmente, Luis Salvago conmueve con su relato y esa profunda mirada al alma que nos invita a reflexionar sobre nuestra propia fragilidad y provoca una conexión íntima con los protagonistas. En Josephine se experimenta con la búsqueda constante de una identidad que se desvanece y que escapa como la niebla entre los dedos. Josephine habla de una existencia que existe, pero no sucede.

Luis Salvago ha construido un espacio casi pictórico, en el que la representación de las escenas de interior se subraya mediante la presencia de una ventana a través de la cual llega el ruido del puerto y se divisa una maraña de azoteas, calles estrechas y oscuras, lugares que generan aislamiento y desconciertan porque se han convertido en un laberinto del que cuesta salir.

Luis Salvago pinta un cuadro en el que la esencia humana aparece desnuda y la desesperación conecta con la esperanza. Como observador meticuloso, nos hace testigos de su mirada desde adentro, fuerza a imaginar versiones, proyecta sombras creadas a partir de la luz y deja al lector ante la evidencia del drama con una composición cuidadosamente construida.

Título: Josephine

Autor: Luis Salvago

Editorial: Galaxia Gutemberg

Páginas: 200

Año: 2024